Son muchos los restos que, a lo largo de la historia, Castroverde de Campos ha ido acumulando en su municipio. De su glorioso pasado dan cuenta las múltiples iglesias y templos que poseyó, unos restaurados, otros desaparecidos, como el Monasterio de San Vicente, y varios en ruinas. Es el caso de la Iglesia de Santa María de la Sagrada, escondida entre estrechas callejuelas y construida en el siglo XII. Esta se desescombró en 1970 dejando solo en pie el pórtico de entrada de estilo Isabelino y los restos que formaban parte de la torre del homenaje del Castillo.

Otra de las iglesias en ruinas del pueblo es la de San Juan, del siglo XII. De esta solo se conserva un arco embutido en el muro interior de una casa. Fue derruida en 1863. Y, aunque no está en ruinas, también es digna de mención la Ermita de la Cruz, una construcción datada del siglo XVIII, que actualmente está abierta para el culto de los feligreses. Es este un edificio modesto de una sola nave, con cubierta de madera a dos aguas, dividida del presbiterio por un arco de medio punto. Delante de ella hay una cruz de piedra sobre dos gradas que también se encuentra en buen estado. Se cree que en esta zona hubo en su día una sinagoga, pues es sabido que en los pueblos de Tierra de Campos había entre sus vecinos un reducido número de judíos, que en la mayoría de los casos eran artesanos o agricultores y que se establecieron en los arrabales de dichos pueblos hasta el momento de la expulsión del año 1492. Al barrio donde está ubicada la Ermita de la Vera Cruz de Castroverde se le conoce con el nombre del Arrabal. 

Pero no todos son restos religiosos en Castroverde de Campos, también existen vestigios de las épocas romana y medieval, entre otras. Los romanos dejaron su huella en forma de calzadas, un antiguo puente, sobre el río Valderaduey, restos de mosaicos y estelas, probablemente pertenecientes a la Villa de Carralina, un horno en el paraje de El Tesoro y una lápida del siglo II. Esta última se encontró en el paraje de los Pedregales y posee una inscripción funeraria, posiblemente parte de un columbario. Se encuentra ubicada en la casa particular del propietario de la finca. Los estudios realizados a la inscripción indican que pudo ser realizada por esclavos, debido a los errores gramaticales que se observan.

En la Edad Media, Castroverde fue una villa amurallada, pero los restos de su muralla apenas han llegado a la actualidad, salvo algún fragmento cercano a la iglesia de Santa María y al río. Esta cerca se edificó hacia la mitad del siglo XIII y fue objeto de diversas modificaciones y reformas a lo largo de su existencia. El pueblo también tuvo un castillo, construido en 1187 por orden de Fernando II. En la actualidad, solo quedan restos de muretes ubicados en el paraje conocido como El Alcázar, detrás de la iglesia de la Sagrada, sobre una terraza junto a la margen izquierda del río Valderaduey. Se cree que fue destruido en los siglos XV y XVI.