Carbellino cuenta con dos rutas. Por un lado, se encuentra la ruta de senderismo que atraviesa el entorno del embalse de Almendra, ruta fundamental debido a la belleza del paisaje y a la gran variedad de especies de fauna y flora de la zona. El embalse de la Almendra es además, uno de los más grandes del norte de Europa y en periodos de sequía deja al descubierto las antiguas construcciones anegadas por el agua creando un paisaje de lo más peculiar. Por otro lado, nos encontramos con una ruta ornitológica ligada a la variedad y riqueza de especies de aves que se pueden encontrar en la zona.

Respecto a sus recursos naturales, debido a la proximidad de la enorme masa de agua que constituye el embalse, cuenta con una gran biodiversidad. A parte del embalse donde encontramos “la Playa”, en la zona se encuentran: El encinar de “La Rasica”, un moral centenario y lpor otro lado, se encuentran la Peña de Las Brujas, lugar de antiguos aquelarres y leyendas, y la Peña de las Ánimas, lugar mágico que no debería atravesarse sin cumplir antes el rito de rezar un Padrenuestro y lanzar una piedra sobre el resto, para conseguir salvar un alma del Purgatorio..

Por otro lado, nos encontramos con las Peñas Ventaneras formadas por enormes rocas de granito que dejan unos estrechos pasadizos debajo de ellas. La Peña Zorrera, que cuenta con numerosos agujeros que suelen ocupar las zorras para tener sus camadas. La Peña de la Cuna, que se trata de un enorme bloque de granito de varias toneladas que podemos mecer como si fuera una cuna incluso con los movimientos respiratorios de la barriga.

En la desembocadura de las riberas nos encontramos con un enorme bloque granito con numerosas erosiones circulares perfectamente pulidas denominadas Las Ollas.

En la orilla del embalse, junto a la entrada de la dehesa de Estacas se encuentra El Arenal. Entre la fuente de El Piojo y Las Curas junto a la desembocadura de la ribera de Almeida se encuentra un barranco denominado el Berrocal de los Alimoches. En los años donde el embalse está alto se forma una isla.

Además, goza de una zona de nidificación de rapaces, usada en ocasiones por amantes de la escalada, ubicada en un farallón de granito de decenas de metros denominado Plaza la Reina.

La zona cuenta con decenas de charcas por todo el pueblo, aunque las más grandes y más conocidas son “Pilo el Asno”, “Carreros” y “La Vallisquía”.

Por último se encuentra El Castillo, un pago cercano al embalse con berrocales de granito de formas caprichosas, que pertenece a los Arribes del Tormes.