De lobos sabe el pueblo de Villardeciervos, y es que la Sierra de la Culebra es territorio lobero por excelencia.
El lobo ibérico, cuyo origen y desarrollo radica en la península ibérica, es algo más pequeño que los lobos europeos. Porta una cabeza grande y maciza, y pequeños ojos de color amarillento. Es característico su hocico con unas manchas blancas denominadas bigoteras. Al nacer, presentan tonos oscuros uniformes en su pelaje que con el tiempo se va tornando heterogéneo, con una mancha oscura a lo largo de la cola, pasando a conferirle honor a su propio nombre Canis Lupus Signatus, puesto que signatus es el término latino para la palabra marcado.
El lobo como gran depredador que es, tiene una dieta basada en presas cazadas, aunque pueda ser rival de la alimentación de aves carroñeras en raras ocasiones. Consume también algunos alimentos de origen vegetal como frutos silvestres.
La Sierra de la Culebra alberga la mayor concentración de Lobo Ibérico de toda la Península Ibérica.