Las fiestas patronales se celebran el 8 de septiembre, en honor a Nuestra Señora de la Cuesta. Ese día, todo el municipio se reúne en la iglesia para realizar una misa dedicada a la patrona. Los quintos tienen un papel muy importante, ya que, después del acto litúrgico, son los encargados de llevar a cabo la Carrera de cintas, que consiste en pasar a caballo por debajo de un cajón colgado, lleno de cintas de raso, cosidas cada una a una argolla y enrolladas en el interior, para coger el mayor número posible. Durante estos festejos se realizan juegos tradicionales, degustaciones gastronómicas, concursos variados, espectáculos musicales, charangas y verbenas, desenjaules y encierros tradicionales, todo ello sin olvidar las tradiciones.

Otra de las festividades celebradas en Vezdemarbán es la de Carnavales, fiesta de origen pagano que en esta localidad festejan por todo lo alto. El acontecimiento principal de estos es el Desempadrinamiento, en el que los quintos desfilan en parejas, bailando por las calles del municipio, al compás de la charanga y vestidos, ellos con capa y sombrero y ellas, con trajes regionales. Los primeros de la fila son la última pareja que se haya casado en el año anterior, vestidos con el traje de la boda. En último lugar, desfila el resto de vecinos, vestidos con sus disfraces. También hay grupos de amigos que quedan para correr el bollo, acto que realizaban los antepasados y que en el municipio se sigue conservando. Consiste en ir recorriendo las casas degustando repostería casera y vino.

Próximo a los Carnavales, el domingo anterior al Domingo de Ramos, se celebra el Domingo Tortillero. Ese día se realizan una misa y una procesión con el objetivo de bendecir los campos para tener buenos cultivos y un tiempo favorable. Después, los vecinos disfrutan de una comida campera con bocadillos de tortilla de patata y productos de la matanza.

El 15 de mayo, la Cámara Sindical Agraria organiza una fiesta en honor a San Isidro, patrón de los agricultores. Ese día, se celebra una Santa Misa, tras la que se saca la imagen en procesión hasta los sembrados, para bendecirlos y rogar por que la cosecha del año sea mejor que la del anterior, así como para que sean protegidos contra las vicisitudes climatológicas. Después de los actos litúrgicos, este organismo invita a todos los vecinos a tomar un buen aperitivo. En mayo también, se celebran los Quintos y se planta el “mayo” en la plaza del pueblo.

En cuanto a las tradiciones de Vezdemarbán, una de las más arraigadas era la matanza, actividad ancestral muy popular entre los lugareños. Actualmente, existe un importante descenso de practicantes, como consecuencia de la emigración y la falta de interés de los jóvenes por el arduo proceso que lleva consigo. No obstante, eso no quita que, para aquellos que aún la practican, sea un momento especial, de reunión familiar, donde se cuentan historias y anécdotas, donde se trabaja en equipo y, sobre todo, se disfruta de deliciosos manjares.